Producción española del año 1956 dirigida por Juan Antonio Bardem, premio de la crítica FRIPESCI en el Festival de Venecia. Juan es un empleado de banca en una capital de provincias, cualquier ciudad pequeña de nuestro país en esos años. La vida allí es bastante monótona, pasear por la Calle Mayor, ir al teatro, a la catedral, al casino y salir de juerga por el barrio viejo de la ciudad. Juan proviene de Madrid y en la pequeña ciudad tiene grandes expectativas, ascender en su trabajo y encontrar una mujer rica con la que emparentarse, mientras tanto pasa el rato con los amigos que ha hecho en el pueblo, principalmente señoritos de casino que queda por las tardes con ellos en el Círculo para jugar al billar y gastar bromas a la gente ingenua del pueblo. En una de ellas Juan tiene que conquistar a la solterona de la ciudad, Isabel, una mujer de 35 años que ya había olvidado su condición de casarse con algún hombre en la ciudad y se dedica a rezar y estar con su madre viuda. La espiral en la conquista hace que Isabel se enamore perdidamente de Juan y ahora nuestro protagonista no sabe como salir airoso de la situación y contarle la verdad a Isabel. Ni con la ayuda de su amigo escritor de Madrid puede Juan resolver el entuerto.
Este relato basado libremente en la novela de Carlos Arniches 'La señorita de Trévelez' examina la mediocridad de la vida en una pequeña ciudad de provincias. Bardem comenzó a rodarla en Palencia pero posteriormente fue detenido y estuvo en la cárcel 15 días, tras ser liberado rodó en Cuenca y Logroño. Es una de las mejores películas rodadas en España y elegida entre las 50 mejores películas europeas del siglo XX. Muestra perfectamente la España sombría y siniestra de la dictadura donde en los pueblos las mujeres aspiraban únicamente a casarse con un buen mozo del pueblo, siempre se pasea por la Calle Mayor y los domingos toca ir a misa a la catedral y después ir a comprar pasteles para todo el mundo refugiarse en sus casas y dejar la ciudad completamente en silencio, solo unos pocos solteros adinerados acaban con las camareras del café moderno. También muestra esa España picaresca, costumbrista y religiosa donde todo se mezcla y que es de difícil entendimiento para cualquier ciudadano de otro país. Una gran obra del tío de nuestro oscarizado Javier Bardem donde te mantiene en tensión durante toda la película y que a ratos te asoma una sonrisa en tu boca para ver lo detestable y cínica que era la vida en España a finales de los años 50 en cualquier pueblo de España, la situación no es que haya cambiado mucho en estos días pero al menos no es tan extremo como en esos tiempos.
Para Recordar: La buena interpretación de Betsy Blair como Isabel y la ambientación que realiza Bardem de la pequeña ciudad, cuida hasta el más mínimo detalle. Algunos diálogos son buenísimos e hilarantes.
Para Olvidar: Lo cabrones que eran los amigos de Juan, lo hacen tan bien esos secundarios que los odias en el fondo.
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