¡Vampiros en La Habana!

Cuba (1985)

Producción de animación dirigida por Juan Padrón que realiza el guión junto a su hermano Ernesto, parte de la financiación es española. Para los vampiros supone un gran problema el Sol porque con él desaparecen y les elimina, desde los primeros tiempos en la ciencia de los vampiros todos los esfuerzos se han encaminado a crear un producto que les permita poder realizar actividades humanas como salir de día o ir a la playa. El conde Drácula hizo su primer intento en la zona de Baviera para poder resistir al Sol pero fracasó, uno de sus familiares sí que logró realizar un producto con éxito pero al ser perseguido por otros clanes de vampiros tiene que huir hasta La Habana para poner en práctica su experimento. Uno de los dos clanes son los vampiros europeos que ahora mismo parten en desventaja respecto al clan de vampiros de Chicago que se hacen llamar la Capa Nostra. En Chicago han desarrollado todo un mundo vampírico donde no hace falta salir de día a las calles ya que tienen de todo, playas, centro comerciales y casinos para vampiros. Por ello los vampiros europeos quieren obtener el nuevo producto que está en La Habana para poder comercializarlo y así recuperar el poder respecto a la Capa Nostra, mientras los americanos quieren hacer desaparecer dicho producto. Hasta la capital cubana se desplazan ambos clanes de vampiros para arrebatarle la fórmula al familiar del conde Drácula, pero este se la da a su sobrino Josef Von Drácula que puede soportar la luz del Sol gracias a su creación que la llama 'Vampisol', Josef que es conocido en La Habana como Pepe, no quiere saber nada del asunto, desconoce su origen vampírico y sólo quiere el amor de su novia Lola y tocar su trompeta. Pero la guerra ya está desatada y tiene que lidiar para guardar la fórmula ante ambos clanes porque quiere honrar a su tío y dar la fórmula a todos los vampiros. También tiene que huir de la policía cubana por los asuntos más bien turbios que se trae, unos asuntos revolucionarios.

Queremos dar cobertura en este blog a distintos géneros dentro del séptimo arte y no descuidar las grandes obras de animación que se realizan, en esta entrada tenemos esta pequeña joya que proviene de Cuba. Lo que en principio alguien pueda pensar que es una película de serie B muy mal realizada y sin argumento luego llega a una gran equivocación porque con apenas medios pero con un buen argumento se realiza un buen metraje de 69 minutos de una historia de vampiros donde se hablan de cosas muy importantes. Pepe además de músico y vampiro, es un revolucionario cubano que quiere derrocar el régimen de Machado, lucha por el amor de una mujer, Lola, que también quiere a Pepe con locura. Luego está la parte de los negocios donde se da una visión muy clara de los pensamientos en la Cuba actual respecto al mundo exterior, para ellos los europeos no son más que simples comerciantes que quieren sacar beneficio de las creaciones de los demás, peor visión se tiene de los EEUU, donde la mafia campa a sus anchas y todo atisbo de competencia para el negocio debe ser eliminado, muy al contrario que la visión cubana donde toda idea debe ser compartida en beneficio de todos. Muy destacable es la música durante toda la película, la trompeta de Pepe suena estupendamente con una música cubana de muchos kilates. Tenía muchas reservas respecto a esta producción pero me ha sorprendido muy gratamente, de hecho tuvo bastante éxito y en el año 2003 se realizó la segunda parte de este film que se titula 'Más vampiros en La Habana'. Esta primera parte la recomiendo para pasar un buen rato ya que además los tintes de comedia durante el relato quedan bastante bien.

Para Recordar: Siendo una historia de dibujos animados sobre vampiros es una historia sobre el poder, la industria y el negocio encarnados por dos clanes, los europeos que quiere comercializar el nuevo producto y los estadounidenses que quieren eliminar la competencia. Los protagonistas románticos quieren que el invento sirva para todos los vampiros y gratis. Habla de temas muy adultos y revolucionarios. La banda sonora cubana es impresionante.

Para Olvidar: La calidad y el sonido deja mucho que desear, se nota que la producción cuenta con pocos medios, aún así deja un poso de satisfacción su visión, en primera instancia crees que va a ser una película de serie B muy cutre.



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