Hipócrates

Francia (2014)

Producción dirigida por Thomas Lilti, nominada a 7 premios César y ganadora del César a mejor actor secundario por el papel de Abdel interpretado por Reda Kateb. Benjamin es un estudiante de medicina que ya va a hacer las prácticas en el hospital, tiene la inestimable ayuda de su padre, el profesor Barois que le aconseja y le protege. Benjamin ha sido un buen estudiante durante la carrera y tiene bastantes tablas para ser médico, un chico sociable pero a la vez serio. En sus prácticas conoce a otro de los estudiantes allí residentes, con Abdel entabla una buena amistad. Abdel es un chico de origen argelino mucho más metódico y disciplinado que Benjamin, proviene de una familia más humilde y a Benjamin le gustan las distracciones propias de un chaval de su edad, las fiestas, las noches interminables, etc... Durante las prácticas Benjamin se topa con la triste realidad que acecha a los países europeos con los recortes en el sector público, falta de personal, de equipamiento y los sanitarios se tienen que multiplicar para atender la demanda de pacientes que tienen. Benjamin en una de las noches de guardia recibe a un paciente que es un vagabundo borracho, se encuentra bastante mal pero con la medicación parece que remiten sus dolores, el fallo de Benjamin es no hacerle un electrocardiograma y a la mañana siguiente el paciente fallece. Se abre una investigación sobre lo que ha pasado y aparece la mujer del vagabundo. Hay que darle una explicación y se va a ocultar que no se hizo el electro, entre médicos se tienen que ayudar y además la máquina de electrocardiogramas estaba estropeada. Benjamin es exculpado del caso y a la mujer se le da otra explicación. Para Benjamin esto supone una crisis en su personalidad, duda de si está hecho y capacitado para este trabajo.

Una película francesa con una temática que perfectamente se podría haber rodado en España a partir de los recortes introducidos en sanidad con el estallido de la crisis económica, es buen acercamiento a lo que es la integración laboral en la medicina, no solo tienes que saber un montón de lo que has estudiado en la facultad, también hay una dimensión ética, social y hasta económica en este campo. Una profesión sin duda que es de vocación, al igual que la educación. Un acierto de la película es que en ningún momento cae en un tono melodramático fácil, cuenta lo que puede ser una realidad cotidiana de un hospital y lo hace hasta con un cierto tono de humor a través de unos personajes que conectan con el espectador, especialmente a Abdel, un papel muy bien interpretado por Reda Kateb. También y se agradece mucho que no haya líos amorosos entre el personal del hospital y demás historias que no vienen al caso, lo que se quiere contar es como funciona un hospital y la problemática de este trabajo tan admirable. Lo otro son series para el prime time que no reflejan ninguna realidad. Es por ello que recomiendo esta película, sin duda no apta para seguidores de 'Urgencias', 'Anatomía de Grey' u 'Hospital Central'.

Para Recordar: la medicina es una profesión de vocación donde tienes que ser muy metodológico y disciplinado. Aún así algo se escapa y puedes tener muchos problemas ya que están en juego la vida de las personas.

Para Olvidar: no se da la suficiente importancia a esta profesión y más en estos últimos años de recortes tanto en equipamiento como en personal, es una vergüenza que algo tan importante como la salud sea recortado en las primeras potencias mundiales económicas.



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