España (1975)
Alicia es la típica secretaria 'mona'
que triunfa en la oficina del rico empresario en el Madrid de los 70.
Un Madrid que es la bandera de la 'evolución' ibérica. Una
evolución que se ve reflejada en gente como sin escrúpulos como
Jaime, un empresario que no duda en engañar una y otra vez a su
esposa con la joven oficinista. En 1975, la mayoría de edad se
alcanzaba a los 21 años y Alicia aún no había llegado a ese mágico
momento, por lo que el gigolo castizo se estaba acostando con una
menor. Un cúmulo de desatinos que desde luego no pasan inadvertidos
para la secretaria que resultará ser más inteligente de lo que
parece cuando se queda en cinta a raíz de las relaciones
extra-matrimoniales con Jaime. Es entonces cuando ejecuta su astuto
plan, sabiendo el daño que haría a la imagen del hombre la
publicidad del hijo bastardo engendrado con una menor. Por eso ella
decide chantajearle y pedirle una pensión vitalicia para cuidar del
retoño, lejos de la capital. Un gran 'movimiento' que
desgraciadamente será fatal para ella cuando un cruel personaje la
asesina en su casa. Todo apunta al futuro padre; sin embargo la
'inocente' muchacha parece esconder un terrible secreto: el chantaje
al millonario no es un hecho puntual; Alicia ha fingido embarazos con
hombres casados por toda España. De esta manera les extorsionaba un
dinero mensual, para mantener al supuesto niño que nunca nació.
Fotos trucadas y cartas mentirosas, eran la única evidencia que
recibían los asustados padres, que eran capaces de creer cualquier
pantomima con tal de no reconocer su vergonzosa aventura. Pero ahora
todo sale a la luz y cuanto más se aclara el pasado de la fallecida,
más difícil parece encontrar a su asesino.
Debo reconocer que, a pesar de haber
leído buenas críticas del film, elegí este largo porque el título
me llamo mucho la atención. Esperando la típica película del
destape y casi perdiendo la paciencia con la copia que llego a mis
manos (puro VHS con sus interferencias y su imagen difusa), me quedé
enganchado a este rotundo thriller made in Spain, que desde luego ha
sido una de las sorpresas agradables del año. Partiendo de un
argumento típico, el ricachón que se aprovecha de la guapa tonta,
se crea una compleja trama que mezcla a la perfección crimen y
suspense. Por un lado es muy interesante ver como la sociedad
española había evolucionado de manera muy dispar en la capital y en
los pueblos. Mientras los oficinistas llevaban una vida liberal y
libertina, en 1975 en España, la mayoría de la gente era católica,
apostólica y romana. De hecho aunque el 'Don Juan' de turno se
atreva a echar una cana al aire, el hecho de tener un hijo bastardo
es tan terrible que, todos los amantes de la mujer, acceden a pagar
un importante chantaje a cambio de que el escándalo no salte. Algo
que hoy en día no parece tener mucho sentido, con gente
divorciándose constantemente. Por otro la misteriosa doble vida de
Alicia que engendra una historia que mantendrá en vilo al espectador
hasta el desenlace final. En definitiva, un gran descubrimiento del
cine nacional que recomiendo a los amantes del thriller ibérico.
Nota: 8.1
Para Recordar:
Las conversaciones del inspector con su
hijo. Brillante filosofía policial y social
Para Olvidar:
Que sea muy difícil encontrar una
copia decente de esta gran película.
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