Irán (2015) Documental dirigido por Jafar Panahi, ganador del Oso de Oro a mejor película en el Festival de Berlín. Jafar Panahi es un director iraní bastante prestigioso en el mundo occidental, películas como El Círculo son absolutamente recomendables. Ahora no puede rodar películas ya que un tribunal iraní lo condenó a pena de prisión y no puede filmar una película en 20 años, se le acusa de hacer propaganda contra el gobierno. Panahi, para burlar la censura, se apropia de un taxi y pone una cámara en el salpicadero para rodar a los diferentes pasajeros que se montan en el vehículo, toda la fauna de Teherán pasará por el taxi de este peculiar director. Rodado como un documental, veremos cómo es la vida de los ciudadanos de Teherán, aunque en realidad es un falso documental, los personajes ya tienen su guion y en algunos casos se les nota bastante en su actuación. Hay tres personajes que acompañan a Jafar en su taxi que son dignos de mención, su abogada, que hablan de su caso y cómo Panahi tiene problemas con la justicia e incluso su familia está amenazada. El vendedor de películas de contrabando, donde puedes encontrar las propias películas prohibidas de nuestro protagonista, películas que no se pueden encontrar en los círculos oficiales iraníes. Por último aparece su sobrina, una muchacha en edad escolar a la que le han mandado hacer una película y lee a su tío todas las órdenes que tienen para que su película sea admitida como trabajo, nada de meterse contra el gobierno y contra el Islam, algunas de las reglas bastante absurdas, siempre la censura ha sido bastante estúpida.
Con esta pequeña peliculita, Panahi burla de nuevo la censura en Irán, al igual que ya hizo con Esto no es una película y Closed Curtain, a pesar de la prohibición de 20 años sin rodar. El director hace todo lo que está en su mano para poder tener nuevo material, en esta ocasión con una simple cámara de vídeo en el salpicadero de un coche. Como os podéis imaginar, la calidad del film es bastante mala pero es un gran ejercicio por la libertad de expresión y para nada se hace aburrido el relato. Panahi mueve la cámara para que se vean perfectamente los pasajeros de su vehículo, no esconde nunca la cámara y los diálogos son amenos, también se ve que nuestro protagonista es un gran tipo, amable y simpático. Un film muy necesario que sin duda recomiendo, dosis humor, ingenio y libertad de expresión es una buena mezcla y más si es en un país islámico. Espero que pronto pueda salir del país y pueda rodar las películas que le apetezcan.
Para Recordar: al director Jafar Panahi, arrestado sin poder salir de su país y con una condena de 20 años sin poder rodar una película.
Para Olvidar: lo absurda que es la censura, escuchas leer la lista de tonterías que tiene la sobrina del director y no te crees que estemos en el siglo XXI.
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