La séptima victima

USA (1943)

Una inocente joven que estudia en un colegio católico, se percata que su única hermana ha desaparecido en la gran ciudad. La muchacha decide ir a buscar a su primogénita, a pesar de que no tiene ni idea de como moverse en la urbe. Visita el último lugar donde trabajó, una empresa de cosméticos que ahora regenta otra mujer. Nadie sabe nada y la única persona que puede ayudarle es un “amigo”, que finalmente resulta ser el marido. Totalmente sorprendida, la chica colabora con él en la búsqueda. Además contrata un detective privado que asegura poder encontrarla. Una noche oscura, ambos se cuelan en la tienda de cosméticos en busca de una posible “celda” donde este secuestrada la mujer perdida. El allanamiento termina con el detective muerto y con un misterio aún mayor. Pero el marido sabe más de lo que dice y, seducido por la hermana pequeña, coopera hasta descubrir una siniestra organización de adoradores de Satán. ¿Que tendrá todo esto que ver con la vida de las hermanas?

En 1943, Mark Robson se filma una de las primeras, me atrevería a decir, películas con una trama relacionada con sectas satánicas. Honestamente esto es lo que más me atrajo de las sinopsis, ya que esperaba un film de cine negro con un trasfondo sectario. No me podía imaginar como en 1943 se podría tratar este tema. En realidad la manera de tratarlo es muy natural, y más que una secta malévola al estilo “La Familia”, los componentes de la hermandad de belcebú, son unos tipos anti-violencia que ejercen una influencia muy “intensa” en sus miembros. La séptima victima es una película de suspense, muy entretenida y que gustará mucho a los seguidores del cine negro de los 40 que busquen algo diferente. Con una historia bastante básica, el director va mostrando los personajes para construir una trama criminal repleta de guiños sentimentales. Manteniendo el suspense hasta el último momento, Robson crea un largo original que podría haber estado a la altura de los clásicos si hubiera complicado un poco más el guión. Como extra, el abordar el tema de las hermandades diabólicas que tanto juego ha dado en el mundo del cine.

Nota: 8.0

Para recordar: La escena del detective en el metro. A la altura de los grandes del cine negro.
Para olvidar: La secta satánica pasa un poco de puntillas por la trama global.


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