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lunes, febrero 01, 2010

Persiguiendo a Amy

Holden y Banky son dos amigos de toda la vida a los que les une mucho más que una amistad. Trabajan juntos dibujando comics y comparten piso. Todo en la vida les funciona fenomenal hasta que en una fiesta conocen a Alyssa Jones. Esta guapa y enigmática mujer, pronto cautivará el corazón de Holden. Sin embargo un problema inesperado bloquea cualquier relación: la chica es lesbiana. Esto no frena al muchacho que disfruta como nunca con la bella chica. Cierto día decide lanzarse y revelarle sus sentimientos; sorprendentemente, Alyssa accede a salir con él, lo que provocará en Banky unos celos desmesurados. El enojado amigo, investiga en la vida de la mujer y descubre que no es lesbiana; es más, anteriormente disfrutaba de una lujuriosa existencia en la que el sexo primaba por encima de cualquier otra cosa. Banky, narra este hecho a su mejor colega y la relación con la señorita Jones se deteriora; el hombre no tolera que su chica se haya acostado con media ciudad y decide abandonarla. Por la parte femenina, ella no entiende que su pasado sea un obstáculo, cuando eso ya no lo volverá a hacer ya que esta súper enamorada del dibujante. Y entre estos líos Holden tiene una idea peregrina para recuperar tanto la amistad de Banky como el respeto por Alyssa. Una idea alocada que terminará de la forma más racional posible.

Obra cumbre del admirado Kevin Smith. La consagración de su comedia ácida curiosamente llega con su realización más melodramática. Como si de un Woody Allen macarra se tratara, Smith refleja las relaciones sentimentales de los treintañeros de manera elocuente y mordaz, a la vez que habla de temas tabú con la mayor naturalidad. Conversaciones brillantes, legendarias dentro del ámbito independiente (como la conversación que por fin tienen Bob el Silencioso acerca de Amy y que da título al film), salpican las casi dos horas que dura este largometraje. Mirando más allá del gamberrismo de sus obras anteriores (Clercks, 1994 y Mallrats, 1995), Persiguiendo a Amy retrata valores muy importantes de los jóvenes de más de 30 años: los celos del amigo de toda la vida cuando su colega encuentra novia, los miedos del género masculino cuando coincide con una mujer libertina, la dificultad de tener una relación estable cuando se ha pasado por múltiples parejas, la dificultad de encontrar lo que se quiere sin probarlo todo… Un compendio de situaciones irreverentes, que a muchos nos resultan familiares, para completar un guión más que brillante y coronar a uno de los clásicos más alabados del cine independiente.

Nota: 9,3


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