UK (2011)Eva es una mujer decadente repudiada por la sociedad. Sin más aspiraciones que terminarse una botella de vino diaria, esta cincuentona esta castigada por la vida. Una vida que ya no aprecia, pero que debe seguir viviendo y para eso tiene que empezar a trabajar. No será tarea fácil en una ciudad pequeña que la odia y cuyos habitantes no dudan en agredirle por la calle. Pero ella no se queja, baja la cabeza y sigue adelante. Pero, ¿por qué ese odio hacia Eva? Una mujer tranquila y de apariencia inocente. Para encontrar la razón nos tendremos que remontar dos décadas atrás cuando ella y su entonces marido, en una noche loca, engendraron a un bebe no esperado: Kevin. A pesar de las pocas cualidades maternas de la mujer y de la pesada carga que supone un niño, Eva intentará dar lo mejor de ella misma para criarlo, cosa que no será fácil. Kevin es un niño diferente, perturbado, con odio visceral hacia su madre. Aunque es cierto que no era la mamá más cariñosa del mundo, nada justifica el aberrante comportamiento del muchacho. Desde defecarse encima con 10 años para obligar a su madre a cambiarlo, pasando por arruinar su trabajo, masturbarse delante de ella, provocar lesiones a su hermana… Todo tipo de ‘lindeces’ que Eva intenta entender y de las que se culpa intrínsecamente. En lugar de buscar un profesional e internar a ese monstruo, lo dejan pasar demasiado y Kevin culmina lo que se veía venir desde el principio. Por eso ese rechazo a su madre, una pobre mujer y la victima preferida de ese ser sádico al que llama hijo.
Perturbador largometraje, aclamado por la crítica y ganador de numerosos premios. La escocesa Lynne Ramsay nos trae una historia que si bien podría catalogarse como ‘thriller’, en realidad es un drama sobrecogedor que impacta sobremanera, principalmente a los que son padres. Con la destacadísima interpretación de Tilda Swinton y un planteamiento original, presentando la historia a dos niveles, en el presente y en el pasado, Lynne consigue sumergir al espectador en la paranoia de la madre y su malvado hijo, para llevarnos a lo más profundo de la culpa. Siempre tendremos la duda de quien es el responsable e incluso esperamos que el final nos confirme nuestras sospechas. Sin embargo, el desenlace es diferente a lo esperado y nos dejará atónitos y reflexivos sobre el comportamiento humano y en particular de los hijos. La realizadora juega con los sentimientos paternos y hace que haya momentos de puro pánico al pensar que nuestros hijos podrían llevar un Kevin dentro ¿actuaríamos igual que Eva? Solo saldréis de dudas si veis este recomendable film.
Nota: 8.4
Para Recordar: El encuentro final de Eva con Kevin.
Para Olvidar: Algunas situaciones son algo forzadas.
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