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Chile (2012)

Producción dirigida por Pablo Larraín, ganadora en el Festival de La Habana y premio a la Quincena de realizadores en Cannes, además nominada al Óscar como mejor película de habla no inglesa. En el año 1988 debido a las presiones de la comunidad internacional el dictador Augusto Pinochet se ve obligado a convocar un referéndum para legitimar su dictadura, la pregunta es muy sencilla, Sí o No, en caso de ser la consulta afirmativa, el general tendría cuatro años más en el poder, en caso de ser negativa la respuesta, habría que reformar la Constitución y dar paso a otro gobernante. Lo que en principio iba a ser un mero trámite para continuar con la dictadura se volvió en un revés para el régimen gracias a personas como el publicista René Saavedra. Exiliado en México vuelve a su país para trabajar en publicidad y algunos contactos de la oposición a Pinochet contactan con él para que se haga cargo de la campaña publicitaria al No. Al empezar su respuesta es no colaborar con ellos para no pringarse en su trabajo ejecutivo pero viendo el panorama y como torturan a su ex mujer decide meterse en el asunto. La campaña diseñada por los distintos partidos de la izquierda chilena es un desastre basándose en recuperar recuerdos dañinos del pasado. Para René el enfoque tiene que ser diferente, una campaña basada en la alegría y la reconciliación nacional, a pesar de los obstáculos tanto de la izquierda a sus ideas y la constante amenaza del gobierno de Pinochet a su entorno, René consigue llevar a cabo su idea con notable éxito.

Una bonita producción de un país tan poco cinematográfico como es Chile y que ha cosechado un gran éxito fuera de sus fronteras. Larraín con un tono humorístico y caústico ante la desgracia que suponía vivir en Chile en esos momentos, construye un relato basado en la obra teatral 'El Plebiscito' de Antonio Skármeta. Se pueden destacar muchos aspectos del film, la buena interpretación de Gael García Bernal como el héroe anónimo René Saavedra, el gran trabajo de documentación por parte del equipo de la película para mezclar hechos reales con la historia y una banda sonora preciosa. Pero sobre todo lo que destaca es que no te aburres y es una historia muy compacta para dos horas que te hace reír, emocionarte e identificarte con muchas situaciones que ocurren en la actualidad. Como funcionan tanto los medios de comunicación de izquierdas o de derechas, la izquierda con ese resentimiento en las heridas del pasado que hacen que no vean el futuro o esa derecha rancia que se dedica a desprestigiar al bando contrario o incluso a criminalizarlos en forma de terroristas que van contra su propio pueblo. Son hechos que pasaron en 1988 y que 25 años después están de plena vigencia y actualidad. Muy recomendable para amantes del cine social y que quieran aprender algo de publicidad, política y medios de comunicación con un toque de humor. Si Don Draper hubiese conocido a René Saavedra sin duda lo hubiese contratado para su compañía en Madison Avenue.

Para Recordar: La brillante campaña por el No de René Saavedra en un plebiscito para la reconciliación nacional, una bonita banda sonora y un humor que hace que los problemas los afrontemos desde una perspectiva diferente.

Para Olvidar: El amateurismo en la calidad de la imagen del film, una cosa es que quieras ambientarlo en los años 80, con los coches, escenarios y aparatos. Pero que sea una imagen tan pobre y tan amauteur pierde calidad, aunque pueda ser que a los puristas les guste ese aspecto.



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Trailer de la película




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